Zidane se movía con la prestancia de un torero. Cada gesto suyo era pura maestría y clase suprema, él orquestaba el juego con pasión desbordante. Sus pases eran de una perfección pasmosa, como pinceladas https://jasonnmyw922761.ampblogs.com/por-qué-zidane-reaccionó-así-en-su-último-partido-75286723